09.07.13 - 15:36 ¦ Generales

TODO ES HISTORIA VERDOLAGA - EL GERENCIA“MIENTO” TAN TEMIDO

A mediados de 2002, el país trataba de salir del largo invierno neoliberal, que ya había mostrado que el árbol se conoce por sus frutos. Ferro en cambio, insistía en ser vampirizado. Ahora, por uno de los mayores depredadores del fútbol que cobró visibilidad durante el menemismo: Gustavo Mascardi y su inefable Gerenciar S.A.

El gran –e injustamente olvidado– Agustín Cuzzani (1924-1987) fue un genial dramaturgo, autor de “El Centroforward Murió al Amanecer”, cuya prieta síntesis es: El club de fútbol Nahuel Athletic tiene al mejor centroforward del momento, Arístides “Cacho” Garibaldi, ídolo de la afición y jugador idealista. Pero el club es llevado a la quiebra por un millonario llamado Lupus ("Lupus" en latín quiere decir "lobo" y, además, una enfermedad autoinmune crónica), con el fin de apoderarse del crack. Garibaldi es rematado y Lupus lo compra en 1 millón 700 mil dólares.
Cualquier semejanza con la realidad verdolaga: ¿es coincidencia?
Cuzzani escribió esta joya ¡¡en 1955!! Con sólo 31 años de edad. Únicamente los talentosos ven con anticipación lo que vendrá.

El genial creador de “El Centroforward Murió al Amanecer”, Agustín Cuzzani.

Rendido el merecido homenaje al maestro Cuzzani, volvamos al 2002, más precisamente al 19 de Julio, cuando el juez interviniente en el concurso, Rodolfo Herrera (luego escrachado en el programa Telenoche Investiga) decide que “la única salida” para el fútbol verde era que el ícono de los Elaskar y los Fariña, se hiciera cargo: “En esa fecha se había redactado el convenio de asistencia con Gerenciar SA, que el todavía juez en funciones Herrera insistió para que firmaran las autoridades del club. Para ello se comunicó personalmente por conducto telefónico a la casa del entonces presidente de la institución, Guillermo Osvaldo Socino, lo citó al tribunal, le hizo saber que se había contactado con Gustavo Mascardi para que se haga cargo del fútbol, le indicó que debía decidir la firma del acuerdo con premura dado que este último debía viajar a Italia, le manifestó que si aceptaba la oferta trabajaría el fin de semana en el convenio y permanentemente se refirió a ese acuerdo como la ‘única salvación del club”. (http://www.pagina12.com.ar/diario/deportes/8-191374-2012-04-08.html)

Socino coronó su brillante gestión y Lupus Mascardi entró por la puerta grande para hacer negocios en Ferro (el 1º de Octubre asumió Walter Porta como presidente electo del club –hasta ahora el último– y Herrera dictó la quiebra como un regalo de navidad que aún perdura: http://www.lanacion.com.ar/470964-no-se-quiebra-walter-porta-el-abanderado-de-ferro).

El rapaz agente de bolsa optó por Daniel Raimundo como “orientador táctico” y Oeste nuevamente vivió un arribo masivo de “grandes valores del balompié”: el guardameta Carlos Bangert, los zagueros centrales Gonzalo González y Diego Rodriguez y el lateral ugandés Ibrahim Sekagya, los mediocampistas Federico Rúgolo, Gerardo Cardone y Daniel Verón, completando la “nómina” los volantes Juan Carlos Cisneros, Edgardo Darío Parisi, Cristian Milozzi, Diego Figueroa (quienes prácticamente no jugaron) y el delantero Carlos “Gatito” Leeb, quien tras un par de partidos, decidió retirarse del fútbol, dado el “estado” en que estaba (anticipando casi 10 años al accionar del colorado Sava). A todos ellos, hay que sumar los “regresos” de Emmanuel De Porras, Raúl Benítez y Leandro D´Amico. Los tres fueron a Huracán, ¿llevados por el intermediario Marcelo Simonián, titular de la Productora Dodici? En la web de esta empresa, figuran los jugadores representados: http://www.dodici.com.ar/jugadores. Hay una perlita: Sergio Comba –aquel que llegara a Ferro para la inolvidable gestión del bambochense Insúa– goleador de “raza” con una trayectoria impresionante (para corroborar esto: http://www.bdfa.com.ar/jugadores-SERGIO-HECTOR-COMBA-2783.html) lo que muestra la importancia de un representante.

Además de "Lupus¨ y sus culatas anabolizados, integraban el plantel los jugadores del club: Germán Caffa, Alexis Ferrero, Cristian Tula, Maxi Velázquez, Pablo Saucedo, Gerardo Taboada, Félix Décima, Agustín De La Canal, Jaime Molfeso, Osvaldo Yonng, Luis Catalán, Eugenio Klein, Mario Costas, Lucas Bevacqua, Luis Salmerón y Juan Mugabure.
O sea, 14 refuerzos, 3 “retornados” y 16 jugadores del club. ¿Demasiados? ¿Cuál sería el negocio?
Ya se verá.


Parados: Daniel Verón, Mario Costas, Ibrahim Sekagya, Luis Catalán, Maximiliano Velázquez, Carlos Bangert y Gonzalo González. Agachados: Eugenio Klein, Emanuel de Porras, Federico Rúgolo y Cristian Tula.

La forma de disputa del torneo, podía considerarse un engendro. Estaba dividido en dos fases: en la primera, los 23 equipos participantes jugaban todos contra todos partidos de ida. Las posiciones finales establecían cómo conformarían las 3 zonas (una de 8 conjuntos y dos de 7 equipos cada una) jugando dos ruedas; 14 fechas, partidos de local y visitante, también todos contra todos de su zona.
Raimundo; quien no logró una eficaz empatía con la parcialidad verdolaga; optó por línea de tres en el fondo, cuatro volantes, un enganche y dos de punta. Ganó más de lo que perdió, no obstante no brindó una muestra de total solvencia (se notaba a distancia que la figura del gerenciador, era un peso difícil de equilibrar). Al salir primero en las 2 fases, ganó el derecho a ascender en forma directa, sin tener que soportar nuevamente una final, como la perdida ante Español, la temporada anterior. Lupus, aparte, podía proyectar tranquilo: contaba con el beneplácito del Duce Grondonista, quien hasta le permitió colocar un hombre suyo en el tribunal de disciplina.

Un joven y delgado Salmerón fue el máximo scorer, con 11 tantos.

El DT sin embargo, aprovechó para promover a algunos juveniles, como muestran los dos últimos partidos de la 2ª fase, primero en el que ganó el derecho a ascender, el 7 de Junio ante Armenio:
Bangert; Saucedo, Gonzalo González y Tula; Rúgolo, Décima, Young y Taboada; Molfeso; De Porras y Salmerón. Sup.: Caffa, Velázquez, Catalán, Verón y Costas. Goles: De Porras y Décima (penal). O en el último encuentro, en Caballito ante San Miguel:
Caffa; Sekagya, Gonzalo González y Tula; Rúgolo, Young, Décima y Taboada; Molfeso; Salmerón y De Porras. Suplentes: 12) Fernandez 13) Velazquez 14) Verón 15) Klein 16) Costas. Cambios: ST 11´ Verón x Molfeso, 25´ Klein x Young, 28´ Velázquez x Tabeada. Gol: 18´PT Salmerón.
Obsérvese que la mayoría eran jugadores de inferiores, así como la producción goleadora, Salmerón fue el goleador, con 11 conquistas, seguido de De Porras con 10 y Costas, con 8.
Esos encuentros fueron las despedidas de Tula, Klein y Velázquez. Los dos primeros fueron transferidos a River (Klein jamás jugó ahí, fue cedido a Defensores de Belgrano y algunas temporadas más tarde volvió un año a Ferro). Maxi Velázquez fue un año a préstamo a Talleres de Córdoba y luego transferido en forma definitiva a Lanús.


Mascardi, rodeado del equipo campeón. El “mecenas” gerenciador estaba llevando agua para su molino.

Por esas ventas, Mascardi y su padre, Emilio, fueron procesados por estafa: adujeron que los jugadores fueron vendidos por montos inferiores a los reales. Lupus había hecho su negocio. Y Cuzzani mostró que su obra sigue vigente.

Fuentes de esta nota: Página/12, La Nación, Base de Datos del fútbol argentino, josecarluccio.blogspot.com, En Una Baldosa y datos propios.

[volver]