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16.09.19 - 09:25 ¦ Generales
HISTORIAS DE CORAZÓN VERDE
Les presentamos una de las tantas historias que podes encontrar en el excelente trabajo que hizo la Subcomisión de Mujeres y que podes descargar completamente aquí:
https://www.ferrocarriloeste.org.ar/corazon-verde/
Si tenes el corazón verde no vas a poder dejar de emocionarte, o sentirte identificada cuando recorras el texto.
En Ferroweb nos atrevimos a seleccionar caprichosamente algunas que iremos compartiendo con el correr de los días.
Hoy compartimos la historia de Victoria Crivelli.
EL MEJOR LUGAR PARA ESTAR
Muchas veces me preguntaron qué es Ferro para mí. No tengo historia para contar que no tenga que ver con Ferro. Absolutamente todo lo que me pasó en la vida nace o termina ahí.
Mi abuelo me hizo socia del club apenas nací. Mi infancia en el club transcurrió entre la escuelita de natación, el centro deportivo y la búsqueda de un deporte que me gustase teniendo como prioridad, por parte de mis papás, que sea un deporte en equipo.
Un día me encontré con el handball. Al principio solo se trataba de algunas tardes en el patio de la sede para divertirme un rato. El verano siguiente me acerqué a la captación del equipo federado y ahí me quedé. Tuve la suerte de crecer en el playón más lindo del mundo, rodeada de personas que fueron y son de suma importancia en mi vida. El playón fue el punto de partida para soñar con todo lo que vino después. Ganar el primer título al lado de mis amigas, jugar en la selección, y el sueño de mi vida: participar de un Juego Olímpico.
Todo empezó en el playón.
Soy muy agradecida al club por haberme mostrado cuál es mi pasión y por acercarme a cada una de las metas deportivas que me puse o que me fue poniendo la vida. Pero más agradecida soy por la gente que conocí, por los valores que me enseñaron, y por ese sentido de pertenencia que aprendí a poner por sobre todas las cosas.
Tengo el privilegio de defender la camiseta verde todos los fines de semana, con la convicción de saber lo que representa. Ferro es nuestra historia, nuestros amigos, nuestro amor y desamor también. Ferro es las frustraciones deportivas, los festejos más sentidos, las ilusiones de cada año, la resignación, los años malos, el renacer, y el querer siempre un poquito más por el club y para el club.
Ferro tiene algo único y es que siempre querés estar ahí, y querés estar ahí porque en Ferro nunca estás solo. Todos nos conocemos, todos en algún momento nos vimos, quizás hasta nos abrazamos o intercambiamos alguna risa o algún comentario. Y además tenemos eso que nos diferencia de los demás. A nosotros, los de Ferro, se nos pone la piel de gallina con el Etchart lleno, nos emocionamos hasta las lágrimas con la Fiesta del Color, y se nos infla el pecho de orgullo cuando en una tarde de fútbol vemos el barrio colmado de camisetas verdes.
En tiempos donde el valor de la identidad es tan difícil de encontrar, donde muchos se identifican por el odio hacia algo o alguien, en Ferro nos identificamos por el amor al barrio, a la camiseta y a los colores. Este club nos hace sentir parte de algo, nos hace sentir cómodos, felices y en casa. Por
eso, a quien me pregunte, no tengo dudas: Ferro es siempre el mejor lugar para estar.
Victoria Crivelli
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