30.06.19 - 22:10 ¦ Basquet

DE ALTO VUELO

La temporada de Ferro en La Liga Nacional

El tiempo va pasando y la sangre en el ojo se va yendo. Nuestras cuerdas vocales vuelven a su normalidad y las imágenes de aquel último partido con San Lorenzo se van difuminando. Cada uno de nosotros vuelve a su vida, a sus cosas, y está listo para encarar estos tres meses y medio sin ver a Ferro. Pero, ¿realmente será tan fácil este proceso posterior? desde este humilde espacio considero que no. Esta temporada de Ferro será muy difícil de olvidar. Lo que nos dejó este Ferro será difícil de olvidar. Por eso, propongo hacer un breve repaso a esta locura de año.

Atrás quedó ese negro principio de 2018 en el que “el otro Ferro” entró en una racha de doce derrotas al hilo, donde los jugadores extranjeros desfilaban, y el verde perdía más de lo que ganaba. Atrás quedó, también, ese mes de mayo dramático en donde los hinchas de Ferro nos debatíamos entre la vida y la muerte (deportivamente hablando). Atrás quedó ese último partido con Salta Basket en el Etchart en el que Ferro mantuvo la categoría poniendo fin a ese calvario. Luego de todo eso, ¿alguien creía que lo que vendría sería tan mágico como lo que vino?

En cuestión de preparación, el tiempo se le vino encima a Ferro. Empezamos el Super20 con cuatro fichas mayores, Orresta, Fierro, Cosolito y Kevin Hernández, los únicos “sobrevivientes” del equipo que había jugado el Playout por el descenso, el resto eran juveniles y el mismo DT. La temporada inició con una gran victoria frente a Hispano Americano en Río Gallegos, un rival siempre difícil y más jugando como local. En dicho juego, Ferro revirtió una diferencia de más de quince puntos y a decir verdad, demostró un carácter que al Ferro pasado le faltó durante todo el año. Porque eso fue lo que caracterizó desde el día 1 a este equipo: el nunca entregarse como bandera.

Ferro terminó redondeando un muy buen Super20 quedando eliminado en cuartos de Final con el poderoso San Lorenzo. Para ese entonces, ya se habían sumado los dos extranjeros que acompañaron durante todo el año: Holloway y más tarde Mitchell. El verde parecía ser la sorpresa de la temporada, aunque según palabras propias del DT, el equipo se armó para eso desde un principio.

La temporada en la Liga Nacional fue, simplemente, mágica. Victorias resonantes jugando como visitante, giras enteras en las que el equipo ganó tranquilo (caso Santiago del Estero o Mar del Plata). Una localía fuertisima y casi invencible en la que, incluso el más poderoso cayó por 38 puntos. Partidos en los que uno entraba a la cancha sabiendo que el equipo iba a ganar. Y a la postre, refuerzos que desde el día uno se acoplaron excelente al equipo. Este es el caso de Luciano Massarelli, un jugador que llegó con una lesión importantísima en su rodilla que lo había privado de las canchas durante un año entero (casualmente, el partido en el cual se lesiona es enfrentando a Ferro). Lucho entregó todo y fue un arma de gol letal en partidos calientes donde la cosa parecía complicada. Se acopló perfecto al grupo y, con un gran corazón, dio muestras de sobra que la lesión no lo complicó.

La Liga Nacional terminó con Ferro ubicado en la posición 5. Quizá, por lo realizado en todo el año, el quinto puesto quedó un poco chico. Ferro rondó entre el 2do y 3er puesto durante todo el año, pero tras una seguidilla de derrotas y triunfos de los rivales que le movían el puesto, El verde quedó 5to teniendo que enfrentar a Quimsa en la primer ronda de Playoff. Un rival que, en la previa, se veía duro. Un equipo full goleadores y con gran poder anotador. Además tenían un gran entrenador como Silvio Santander. Poco le importó a Ferro esto ya que venció con autoridad en los dos primeros juegos disputados en Caballito, y en Santiago, si bien perdió el tercero con mucha autoridad, logró llevarse el cuarto y la serie. Esperaba a la vuelta de la esquina Comunicaciones de Mercedes, el equipo que le había robado el cuarto puesto y que encima, tenía como técnico a Ariel Rearte (el DT del Ferro del año pasado). La serie fue de gran paridad, comenzó con una derrota sin atenuantes como visitantes allá, en Mercedes. Un partido en el que Ferro jamás hizo pie. 48 horas más tarde, Ferro le propinó lo mismo a Comu, ganándole por treinta puntos de diferencia y robando la localía. Hizo lo suyo en el tercer partido venciendo por veintiuno y todo parecía indicar que el verde ganaría los dos de local e iría a la serie con San Lorenzo. Pero Comu logró llevarse el cuarto partido, tras perder por quince, y forzó un quinto en su casa.

Parecía que Ferro se había complicado solo y se habría autoeliminado. Pero ya demostrando su gran carácter frente a paradas bravas, el verde logró ganar el quinto juego como visitante en un partido para el infarto. La victoria por tres aseguró el pase a semifinales, algo que no se lograba desde hacía 22 años.

Poco pudo hacer Ferro frente al poderío de San Lorenzo. Perdió el primer partido sin atenuantes. Estuvo a punto de llevarse el segundo tras remontar 21 puntos, pero falló en la jugada que le daba el liderato. Logró ganar el tercero en la última pelota tras una polémica grande en esa última jugada, pero poco pudo hacer en el cuarto. Ferro perdió el cuarto partido y quedó eliminado, pero la eliminación se olía desde el final del tercer período. Ahí, se produjo el momento más importante de esta temporada, faltando cinco minutos y con el partido ya definido, la gente de Ferro realizó la ovación más grande que yo he visto en el Etchart. Todo el estadio aplaudiendo, y cantando, reconociendo la gran campaña. A muchos se nos cayeron algunas lágrimas de orgullo frente a todo lo vivido en esos cinco minutos y en todo este año mágico. Y, con esa ultima escena, como si fuese una película, terminó la temporada para Ferro. Con el Etchart a pleno y con los jugadores declarando que no se quieren ir.

Eso logró Ferro este año, orgullo de pertenecer. Orgullo de ser de Ferro. La temporada más linda desde la vuelta a La Liga generó eso, orgullo de ser de Ferro.

Poco se conoce respecto a la próxima temporada. Lo único que sabemos es que, gracias al pase a semifinales, nos aseguramos jugar la Liga Sudamericana. Se conoce que cuatro jugadores tienen contrato (Orresta, Massarelli, Spano y Gramajo). Se sabe que el DT está negociando su continuidad y se conoce la intención de la dirigencia de renovar, en lo posible, a la mayoría del plantel. Veremos que depara la 19-20 para Ferro, pero, una cosa queda clara: Nada podrá hacernos sentir lo que sentimos durante todo este año. Nada podrá igualar todo este sentimiento de orgullo, de ver como 12 tipos se matan por esa camiseta que vos tanto amas. Y eso, creanme, vale más que cualquier campeonato. Gracias eternas a todos.
Nunca los vamos a olvidar.

Informe: Matias Lulinski - @LulinskiMati

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